Los seres humanos nos enfrentamos al reto de transformar nuestras carreras y ratificar que el crecimiento profesional y la satisfacción personal no son cosas diferentes, ni están desconectadas.
Los seres humanos nos enfrentamos al reto de transformar nuestras carreras y ratificar que el crecimiento profesional y la satisfacción personal no son cosas diferentes, ni están desconectadas. | Foto: Getty Images

Bienestar y felicidad laboral

¿Cuál es el secreto de un equipo feliz y productivo?

Empleados y empleadores se preocupan hoy por construir ambientes laborales de bienestar que permitan la realización personal, el crecimiento profesional y fortalecer talentos naturales. Adaptabilidad a los cambios y nuevas tecnologías son claves.

Adriana Garcés
18 de marzo de 2024

El bienestar y la felicidad en el ámbito laboral se han transformado de manera contundente en las últimas décadas. Al igual que cuando los consumidores eligen productos y servicios que se adaptan a sus estilos de vida, los trabajadores de hoy quieren pertenecer a organizaciones comprometidas con sus carreras, su bienestar y que estén alineadas con sus valores personales.

Esta premisa es un desafío para las empresas, que tienen que adaptar su operación para retener y encontrar el talento que necesitan. Actualmente, lo más valorado por las personas es la flexibilidad, la personalización y la garantía de integrar la dimensión laboral con otros aspectos de la vida.

Lo primero que debemos reconocer es que estamos experimentando una nueva lógica de lo que significa vivir y trabajar, y eso implica un cambio representativo en la humanidad, por su profundidad y velocidad. El más reciente estudio de ManpowerGroup, ‘La era de la adaptabilidad’, muestra cómo esa nueva visión está remodelando los cimientos de lo que significa el trabajo dada la convergencia entre los avances tecnológicos, la conectividad global y el tejido socioeconómico.

Cambios en doble vía

Las oportunidades van en doble vía. Por el lado de las empresas, están evolucionando para ser más eficientes y sostenibles. En el caso de los seres humanos, nos enfrentamos al reto de transformar nuestras carreras y ratificar que el crecimiento profesional y la satisfacción personal no son cosas diferentes, ni están desconectadas.

Sin duda, cuando hablamos de la dimensión laboral el factor económico es fundamental. No obstante, un salario competitivo no es suficiente, pues hay variables como el ambiente laboral, la calidad de las relaciones interpersonales y el aprendizaje que hacen la conexión con la empresa más auténtica.

Las tendencias ponen en el centro al ser humano, y es ahí donde el autoliderazgo, la autogestión y la gestión de carrera son el camino para lograr la felicidad y el bienestar laboral. Para esto, es indispensable reconocer y manejar estratégicamente los talentos naturales, que son las capacidades excepcionales que tenemos, que conectan con nuestra esencia más auténtica y nos empoderan para alcanzar metas y sueños. Por eso, debería ser una prioridad explorarlos y gestionarlos, pues son los que abren la puerta a la realización personal, a la excelencia y a una conexión profunda con el propósito de vida.

Ken Robinson, en su libro El elemento, menciona cómo el elemento es donde confluyen las cosas que nos encanta hacer y las que se nos dan bien. Ese punto de encuentro entre las aptitudes naturales y las inclinaciones personales nos conectan con la energía física y la mental, que es la que nos lleva al desempeño sobresaliente.

Los primeros responsables de la felicidad y el bienestar somos nosotros mismos, y reconocer los talentos naturales es lo más estratégico que podemos hacer para nuestra vida. El segundo componente es la gestión de los estados emocionales, que está relacionado con la toma de decisiones acertadas. Si enlazamos estos dos aspectos, es más probable que seamos felices en todos los ámbitos de la vida.

* Directora Right Management de ManpowerGroup Colombia